La investigación de Steven Lehar:
“De pronto pude visualizar en mi mente que el mundo que veía alrededor mio, incluyendo el retrato de mi mismo sentado en mi sillon, era meramente una imagen generada dentro de mi cabeza, de tal manera que no podía estar fuera en el mundo. En otras palabras, fuera y más allá de las paredes, el piso y el techo de esta habitación que veía alrededor mio, se hallaba la superficie interna de mi verdadero craneo fisico, y más allá de tal craneo se encontraba un inconcebible, inmenso y remoto mundo externo, del cual todo este mundo que estaba en mi experiencia era meramente una replica de realidad-virtual en miniatura”. Lehar, S. (2013). In The world in your head a gestalt view of the mechanism of conscious experience. preface, Psychology Press, Taylor and Francis Group.
La razón esencial detrás de este pensamiento hecho por Steven
Lehar es que realmente somos criaturas habitando un modelo en miniatura del
mundo generado por la más compleja pieza de maquinaria en este universo
conocido; el cerebro. Nosotros controlamos las acciones del cuerpo fisico por medio de una replica interna y dinamica del mismo, denominado “homúnculo sensorial” , el
cual puede ser pensado como una sofisticada interfaz que el cerebro utiliza para
mantener un comportamiento unificado del cuerpo fisico. Esta representación cerebral corresponde directamente con nuestra fenomenologia del cuerpo. Entonces, lo que somos,
al menos en términos de los contenidos de nuestras experiencias, es la manera en
que esta máquina biológica efectúa elegantes operaciones computacionales para entender su
condición actual dentro de su medio ambiente, todo esto con el propósito de
asegurar su propia supervivencia.
Esta clase de introspecciones actúan como potencial combustible para una nueva, y
no-trivial categoría dentro de la filosofía de la mente. La cual bien puede ser vista como una cuestión fascinante, o como una fuente de "vertigo existencial"...
Pintura hecha por Steven Lehar; Libro: The Grand Illusion, de Steven Lehar. Esta pintura ilustra perfectamente el concepto de vivir dentro de nuestras cabezas.